martes, 30 de noviembre de 2010
lunes, 29 de noviembre de 2010
Sopetrán y sus pintores
Darío Sevillano Álvarez
El 10 de noviembre, recibí una gentil invitación, para asistir a la exposición de una joven pintora sopetranera
Alexandra Celina Arbeláez Zapata
cuyo seudónimo en el mundo de la plástica es
Cely
La invitación decía:
La carta de presentación era este hermoso desnudo, que la artista nominó
Lenguaje de mi piel.
Lenguaje de mi piel.
Pero vemos quién es Cely en esta corta semblanza
Alexandra Celina Arbeláez Zapata,
Cely
Cely
Nació en Sopetrán, El 8 de abril de 1978, hija de Francisco y de Gloria, realizó sus estudios en la Escuela Francisco Medina Pérez y en la Normal Superior Santa Teresita, es una de las promesas jóvenes de la pintura en acrílicos y wn óleos.
Ganó su primer concurso municipal Pinta tu pueblo y participó en el mismo concurso departamental, en la Gobernación de Antioquia, a la edad de nueve años. En su colegio siguió cultivando su talento de pintora.
Estudió Arte y Pintura en el Centro Cultural Ricardo Rendón Bravo de Rionegro y Artes Plásticas en Comfenalco. Ha participado en exposiciones de buen nivel artístico en el Palacio de la Cultura del mismo municipio.
Sus principales obras son: La olla de la abuela, El último regalo, Libertad, Lenguaje de mi piel, Un día en primavera, Entrando al paraíso, Sin egoísmo, Bodegón, Aromas del campo, El retrato de Jorge Uribe y De zona tropical, entre otras.
Es bueno agregar que la pintora es hija de una gran educadora y dos de sus tíos son don Gerardo Zapata García, uno de nuestros grandes escritores, y la joven pintora desaparecida a muy temprana edad doña Marleny Arbeláez Herrera.
También es bueno decir que fueron siempre nuestros vecinos y que su padre fue uno de mis mejores alumnos en la escuela primaria.
Gran parte de sus estudios, los realizó con el promotor de artes plásticas: Fernando Hincapié, Pica.
Ha realizado otras exposiciones en Rionegro, Antioquia, con otros de sus compañeros de trabajo, así lo muestra la contraportada de una cartilla que anuncia la exposición.
Ahora veamos algunas de sus obras:
Esta obra, titulada El último regalo, es una mata de orquídea, regalada por su padre a una tía y uno de los esquejes de la planta fue cultivado por su madre, éstas son sus flores.
En esta obra la pintora expresa el grado máximo de tranquilidad de un caballo; la tituló Libertad.
Entrando en el paraíso, es este óleo, una composición de aves del paraíso y girasoles, dos flores tropicales sopetraneras.
Este hermoso momento de dos caballos que conversan suavemente, al vaivén de un refinado romanticismo, se llama Sin egoísmo.
Las naranjas, una de las frutas preferidas de la artista, se muestran con todo su esplendor.
Continúa el derroche de color y naturaleza, en este Día de primavera.
¡Suspenso! Ésta es su primera obra pictórica: La olla de la abuela.
Este es, un fiel retrato del finado Jorge Uribe, que murió en un accidente de tránsito.
Se llama Plegaria y la pose hace gala de su nombre.
Una impresionante concepción de don Quijote y Sancho Panza.
Este es el rincón norte de la exposición.
Por acá se muestran los paisajes.
Aquí están los rostros.
Por aquí, los bodegones.
Este es el rincón de las flores.
Las figuras geométricas.
Este es un regalo para su hermano menor, al que le fascina el rock.
Esta composición de elementos, hace un todo perfecto.
En la fotografía, aparecen de izquierda a derecha: Su hermano, su madre, la artista y su esposo.
En la siguiente página, aparece la contraportada del catálogo de una de las exposiciones anteriores de Cely en la ciudad de Rionegro.
En esa oportunidad se hizo acompañar de Adriana Suárez Henao, Gloria Barrera de Uribe, Gladys Torres de Cuervo, Ana Cristina Velázquez Giraldo, María Victoria Hernández Aerdker, Lina Isabel Jiménez García, María Isabel Arboleda Monsalve, J. Emilio Jaramillo Quintero, Manuela Gómez Echeverri, Cecilia Dereix de Duque, Damaris López Arbeláez, Irais García Álvarez, Mario Antonio Álvarez Jiménez, Nancy Copete Castañeda y Jimmy Esaú Zuluaga Vargas.
También hubo cuatro artistas invitados: Francisco Mejía Restrepo, Juan Arango, Juan Casanueva y Raúl Fernando Zuleta.
Así cumplimos con nuestros artistas, los felicitamos y les damos una cordial acogida en la sociedad sopetranera.
Sopetrán, noviembre 15 del 2010
*
sábado, 27 de noviembre de 2010
La carrera 58
Un pasito más en la aclaración del nombre de la carrera 58
Ayer estuve nuevamente en el barrio Trinidad (antiguo barrio Antioquia) desayuné en el restaurante de don Javier, en toda la esquina oriental de la carrera 58, Sopetrán, con la calle 29. Don Javier me comentó que él había nacido allí hace 64 años y que nunca se ha movido para ninguna parte. Por mi parte le comenté que yo había nacido hace 64 años también, en Sopetrán, pero yo sí me he movido más que pantalón de costeño*.
Le comenté mi interés en conocer el nombre de la carrera 58 y me aseguró que él nunca le ha conocido nombre, Yo le expliqué que desde hace muchos años yo vengo mirando en cada edición del Directorio telefónico que esa carrera 58 se llama Sopetrán.
Reiteró que esa información era nueva para él y que la única carrera que ha tenido nombre es la que sigue y me señaló hacia el oriente (carrera 57). Se llama El Infierno. Yo le dije que en Sopetrán hacia calorcito, pero tampoco como para quedar en semejante vecindad.
Quedamos muy amigos (por la coetaneidad, yo soy 26 días más viejo que él) y no será la última vez que vaya a su restaurante para seguir indagando hasta encontrar la fuente que tuvo el que primero redactó la Nomenclatura Vial para el Directorio Telefónico.
Una suposición
El pasado miércoles 24, la periodista Juliana Vásquez Posada, de El Mundo, Escribió para El Observador (de la misma casa editorial) una reseña histórico-social del barrio Trinidad cuyo primer párrafo lo paso en esta fotografía.
Mi suposición consiste en que Sopetrán fuera uno de los muchos pueblos más con los que la periodista cerró su párrafo. Es posible que varias familias sopetraneras se hubieran asentado en lo que hoy es la carrera 58 y la hubieran llamado con el nombre de nuestro pueblo, por alguna circunstancia. Hasta ahora es una suposición mía.
Voy a mandarle a la periodista esta nota, para ver si obtengo su ayuda y me suministra su fuente para seguir con esta investigación.
Un propósito
Que se haya usado ese nombre para esa carrera puede ser incierto: van dos personas que han vivido más de 60 años en ella y dicen no haberle conocido ese nombre. De lo que estoy seguro es de que para el segundo cumpleaños del blog esa carrera llevará ese nombre. Ando con una cantidad de ideas locas en mi mente para que eso sea posible. A ver quién me sigue.
* Los menores de 50 no le paren bolas a ese dicho que no lo entienden. Hasta la década del 50, niños y adultos usábamos pantalones de paño; ellos para el trabajo, nosotros para el colegio. Los bluyines eran para las vacaciones. En la Costa, por el calor no usaban paño, en cambio usaban una especie de gabardina muy delgadita. Cuando esos costeños venían a estudiar entre nosotros, traían esos pantalones cuyas botas al caminar se meneaban para todo lado y de ahí el dicho.
Gabriel Escobar Gaviria
miércoles, 24 de noviembre de 2010
Fiesta del campesino en Santa Bárbara
El jueves 28 de octubre, la administración municipal, celebró la Fiesta del Campesino en el corregimiento de Santa Bárbara, el de más alto rango, toda vez que fue creado por ordenanza.
Darío Sevillano Álvarez
Miremos cuidadosamente todo lo que se hizo:
Eran las diez de la mañana y el público de las tres veredas que habían sido convocadas: Santa Bárbara, la Isleta y Loma del Medio, esperaban con mucho cariño, la visita de la administración.
El señor Alcalde y su comitiva bajan de los carros y se dirigen al salón, en donde se reunirán.
Los campesinos entran en mucho orden.
Los miembros de la Policía Nacional también nos acompañan.
A pesar de lo elevado del terreno, el día es muy tropical y el señor Alcalde recibe un refresco para preparar su aparato fonatorio.
Los campesinos, esperan la intervención del señor Alcalde en orden y en mucho silencio.
El Alcalde presenta un saludo de bienvenida.
Con la ayuda de los medios electrónicos, nuestro alcalde explica su gestión administrativa.
La exposición dura hora y media.
Salimos y en la vía pública montamos nuestro comedor.
El señor Alcalde conduce a uno de los ancianos respetables.
Nos espera un sabroso sancocho.
El señor Alcalde ayuda a atender a los campesinos.
La doctora Suleima, nuestra gerontóloga, siempre está llena de energías positivas y hasta los irracionales buscan su grata compañía.
Todos se sienten bien atendidos.
El señor Alcalde porciona unos aguacates, para repartir entre el público.
Todos compartimos la buena mesa.
Todos están bien colocados para disfrutar el almuerzo.
El señor Alcalde, la doctora Silvia y el comandante del puesto de Policía, comparten animadamente.
Recordemos que el café, es el pilar más fuerte de la economía de esta región.
Una de las especies vegetales, más aristocráticas, es la araucaria, que llega a elevarse a cincuenta metros.
Tres de los miembros de la comisión gubernamental observan.
La doctora Silvia disfruta este ramo de heliconias.
Todos esperan el acto académico.
La profesora de la Isleta hace la oración.
El acto está en plena acción.
Cada persona toma su asiento.
Recordemos que los de la edad dorada son la parte más noble de nuestra fiesta.
Estas niñitas nos deleitan con un baile.
Esta joven lee algo relacionado con el concurso de reinas abuelas.
Este joven, a pesar de su discapacidad, demuestra que es un gran bailarín.
Llega la primera reina.
Aparece la segunda.
Entra en acción la tercera.
El evento se calienta.
Las señoras interpretan el pasillo Satanás.
A pesar de sus años, todavía cuenta chistes y pregunta si le están escuchando o si debe hablar más duro.
Este es un sociodrama con dos partos a bordo.
Distintas fases del sociodrama.
El primer parto.
Continúa la parranda.
El segundo parto.
Termina con demanda judicial y quejas ante el señor Alcalde.
El señor Alcalde entrevista a las reinas.
Agradece al público y anuncia que el jurado va a fallar.
Se distribuye el algo.
Los miembros del jurado anuncian el fallo.
Gana el concurso doña María, la reina de la Isleta.
Recordemos que se premia a todas por igual.
El burgomaestre felicita a doña María.
Se reparten premios para todos los asistentes.
Cada cual escoge lo que quiere.
Su señoría hace entrega personal.
Rematamos el programa.
Nuestro alcalde chalanea a la Reina.
Terminamos a las cinco y media de la tarde.
Sopetrán, octubre 28 del 2010.
*