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miércoles, 11 de abril de 2012


Viernes Santo
Darío Sevillano

«Et sicut Moyses exaltavit
serpentem in deserto,
ita exaltari oportet
Filium hominis,
ut omnis, qui credit, in ipso
habeat vitam æternam».
(Jn 3, 14-15)

'A la manera que Moisés
Levantó la serpiente en el
desierto, es preciso
que sea levantado el
Hijo del hombre, para que

quien crea en Él tenga
Vida Eterna.
 
Vía crucis

La Procesión de Once se desenvolvió así:

La primera estación:
Jesús condenado a muerte
fue cantada
en el atrio parroquial.
 

El padre Francisco instruye a la
feligresía sobre el comportamiento
en la procesión.

El atrio, la plaza y sus alrededores
están llenos de fieles.

Están en el Sermón de la Sentencia.

La procesión va a empezar.

Se canta la primera estación.

Estamos en marcha.

Este es el paso de la
segunda estación.

Todas las viviendas de las calles
por donde va a pasar la procesión
están muy bien decoradas.
Estos son algunos de
los arreglos florales.
 

 


 

 


Aquí se cantará la tercera estación.

Este es el paso de ella.

Las calles están atestadas de gente.

 Continúan los arreglos florales.

 

 

En este arreglo se cantará
el encuentro de Jesús con su Madre.
 

Observen lo nutrida que viene la procesión.

Este es el paso de la estación.

Más arreglos.
 

Aquí se cantará la estación del Cirineo.

Él va a acompañar a Jesús.

El Cirineo cumple con su misión.

La cantidad de fieles es impresionante.

Otros arreglos.
 

 

 
Aquí se cantará el encuentro con
Verónica.

Su nombre era Berenice, que traduce:
Ella da la victoria; no sabemos por
qué la estación se anuncia:
«La Verónica enjuga el rostro de Señor»;
cuando se debiera decir:
«Berenice enjuga el rostro del Señor»;
recordemos que la palabra «verónica»,
viene de dos vocablos orientales que
traducen: 'La verdadera cara' o ´
'el verdadero rostro';
o sea que lo que estamos diciendo
al anunciar mal el título de la estación,
traduciría: «La verdadera cara, enjuga
el rostro del Señor» o
«El verdadero rostro, enjuga
el rostro del Señor».
Ojalá la Iglesia, cambiara de opinión.

Este es el perfil de Berenice.

La procesión está ocupando cuatro cuadras.

El paso está en pie
para cantar la estación.

Este será el paso para
la segunda caída.

Los ancianos del centro de protección
a la tercera edad, esperan el paso de la procesión.

Estas son las mujeres
que lloran a Jesús.
 

Así se presenta el paso.

En su tercera caída,
Jesús está exhausto.

Este soldado romano lo acosa.

El paso de la estación es así.

La procesión se acerca a la plaza.

La décima estación será cantada
en este paso.

Estos son algunos planos profundos
que pudimos hacer.
 



Llegamos a la meta.

Las imágenes son exhibidas en el atrio, para
el canto de la última estación de la procesión,
porque las otras se cantarán en el curso del día.

La plaza alberga unas cinco mil personas.
 

 Ahora nos vamos a descansar.



Sopetrán, 6 de abril del 2012.

*

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