Historia de la Navidad
Darío Sevillano Álvarez
Desde las primeras civilizaciones que hubo en la
tierra, el hombre mostró que le gusta vivir en sociedad con sus congéneres y que
hay aspectos significativos que lo unen a los demás.
Por esta razón, las viejas civilizaciones celebraban
festivales, que les permitían compartir y sentir esa unidad.
Esas celebraciones, las asociaban con el solsticio de
invierno y coincidían con el final del año; pero los papas, muy preocupados,
porque esas festividades alejaban a la humanidad de los aspectos de la vida
espiritual, situaron el nacimiento de Cristo en esas fechas y montaron el acontecimiento
de la Navidad, que nos acompaña hace muchos siglos.
La
Navidad es época
de unión, paz y amor.
Es
tiempo de alegría
y buena voluntad. Es tiempo
de reunión con la familia y los amigos; es tiempo de especial atención y dedicación a
los niños; tiempo de compras,
regalos, sorpresas y risas; tiempo de viajar para ir a casa de los abuelos o de
los tíos; es tiempo de comer ricos dulces y
preparar deliciosas comidas; es tiempo
de la Novena de Aguinaldos, de
adornar las casas, establecimientos, calles
y parques con luces de colores; es tiempo del arbolito de Navidad, de Papá Noel, del Niño Dios, del Nacimiento, de los Reyes Magos... La Navidad es magia y felicidad... ¡Qué alegría es Navidad!
Pero, bueno, vamos más despacio. ¿Qué es todo esto de la Navidad? ¿Novena de Aguinaldos? ¿Papá Noel,
el Nacimiento, los Reyes Magos, el árbol, las luces?
Lo primero que debemos hacer con la Navidad, es clasificarla:
El origen de esta celebración es cristiano.
El día en que se celebra es el 25 de diciembre.
Se celebra desde el siglo IV.
Es una celebración internacional.
La palabra: Navidad, del latín nativitas, nativitatis, que traduce ‘nacimiento’, es una de las
festividades más importantes del cristianismo, parecida a: La Pascua de
Resurrección o a la fiesta de Pentecostés o venida del Espíritu Santo. (La
palabra «Pentecostés», viene un vocablo griego πεντηκοστή que traduce quincuagésima, fiesta hebrea
que se celebraba cincuenta días después de la Pascua, y en antioqueño significa
cincuenta días después de la resurrección de Cristo).
En esta festividad se conmemora el nacimiento de
Jesucristo en la ciudad de Belén, el día 25 de Diciembre y se celebra en las
iglesias católica, anglicana, en las comunidades religiosas protestantes y en
la iglesia ortodoxa rumana; en cambio en las otras iglesias se celebra el día 7
de Enero, porque estas comunidades religiosas, no aceptan la reforma que el
calendario Gregoriano, nombre que tomó de su reformador el papa Gregorio XIII,
le hiciera al calendario Juliano, que era el antiguo calendario que regía los
destinos de la Iglesia católica de la tierra.
En las antiguas listas de fiestas religiosas figuran la
de San Ireneo (130-202), obispo de Lyon, quien seleccionó los libros que luego
se conocerían con el nombre de Biblia,
y la de Tertuliano, a quien se le llamaba Quintus Séptimus Florens
Tertullianus, (Esto traduce: ‘Quinto séptimo Florencio Tertuliano’), un
escritor eclesiástico y doctor de la Iglesia que vivió en Cartago, no figura la
Navidad por ninguna parte.
La primera referencia que se encuentra de la Navidad en
los libros eclesiásticos es en Alejandría en el año 200 de nuestra era
proclamada por Clemente de Alejandría y unos años después, en el 221, cuando
Sexto Julio Africano, habla del nacimiento de Jesús.
Más tarde, en el año 325, la iglesia Alejandrina, en el
primer concilio de Nicea fija las fechas de: Nativitatis et Epiphaniæ, términos latinos que traducen ‘Nacimiento
y epifanía’. La palabra «epifanía», procedente del griego ἐπιφάνεια, ‘exaltación’,
porque fue el día en que los reyes de la tierra, representados en las tres
grandes razas, blanca, amarilla y negra, reconocieron a Jesucristo como el Mesías.
Recordemos en primera instancia, que Jesucristo, no
nació el 25 de diciembre, sino que se cree, que nació en el mes de mayo, dato
es calculado por unos libros de las celebraciones Hebreas, en el templo de
Jerusalén.
La causa probable de que un papa la hubiera puesto el
25 de diciembre sería la celebración que hacían los pueblos paganos de la
Fiesta del Sol Invencible en tal fecha; pero hubo otras fatales coincidencias,
porque los persas, también celebraban una fiesta a su dios solar Mitra,
adoptado como dios por los soldados romanos que cuidaban la posesión romana de
Persia (hoy Irán) amediados del siglo I de nuestra era. El dios Mitra, con
algunas modificaciones romanas, dio origen al mitraísmo, religión que se
expandió rápidamente por todo el Impeio Romano en abierta competencia con el
cristianismo también en rápido auge por el mismo imperio; también se celebraban
las fiestas de Saturno; entonces el Papa: Julio I, pide que la fiesta del Nacimiento
de Jesucristo sea celebrada en esa fecha, en el año 350, tal vez para suavizar
las bacanales que la humanidad protagonizaba; pero fue el papa Liberio el que
promulgó el decreto de la celebración de
la Navidad en esa fecha en el año 354.
Pero muchos sostienen que la fiesta de navidad, solo
apareció en el reinado de Constantino I El Grande, que ordenó su celebración,
para acercar a sus súbditos al cristianismo.
También es importante decir: Que el primero en
representar un pesebre en vivo, con mula y buey a bordo, fue San Francisco de
Asís, en el siglo XII, en una cueva de Greccio, un pequeño poblado Italiano y
después de esa fecha, esta costumbre permanece hasta nuestros días.
Recordemos que la palabra pesebre, viene de una voz
latina: præsepe, que traducida al
español significa ‘cajón para la comida de los animales’, porque al Niño Dios
lo pusimos a nacer en uno de esos cajones.
Las costumbres navideñas, fueron naciendo a lo largo de
la historia:
El árbol de navidad, nació en Alemania, en las
comunidades protestantes, que iluminaban los árboles de pino con cerillas
metidas en protectores, para que viento no las apagara.
Los villancicos eran canciones que se cantaban en las
villas del período medieval y como se cantaban entre las villas, lo denominaron
«villancicos», que significa canciones de las villas; el primer villancico que
se cantó, era una canción de tipo árabe que se llamaba: Zéjel o estribote.
Noche de paz, fue diseñada por un sacerdote que había
perdido el órgano de la iglesia y no tenía, canciones para celebrar la Navidad;
pero el gran primer villancico de la iglesia católica que se cantaba en las
catacumbas y en las grandes iglesias de la época medieval, fue Adeste fidelis,
leti, triunfantes, que traduce: Atención fieles cristianos, alegres y
triunfantes.
El día de los Santos inocentes, nació de una masacre de
niños menores de edad, que le achacan a Herodes, pero la historia no ha podido
demostrar el hecho; y si hubiera ocurrido, no fueron miles de niños, como
cuenta la leyenda, sino unos pocos infantes que había en esas ciudades aledañas
a Belén, porque Herodes buscaba al niño Jesús, entre los menores de dos años,
para matarlo dada la razón de que él creía, que le iba a arrebatar su trono.
Las posadas o jornadas, que eran una bella costumbre de
mi época de niño, y que en la actualidad están casi desaparecidas, eran unas
celebraciones día a día de la novena, contando y representando las angustias y
tragedias de San José y la Virgen por el camino que conducía de Nazaret a
Belén, y la llegada a la ciudad de Belén, (nombre que traduce la ‘panadería’,
porque en los viejos tiempos en ese lugar una un expendio de pan), en medio de
una helada, se cree que nacieron en el periodo medieval.
La novena, de Navidad fue escrita por la madre
Margarita del Santísimo Sacramento, una religiosa carmelita, a la que se
apareció el niño Jesús y en la aparición estaban estas palabras del primer
capítulo del evangelio de San Juan: «Et verbum caro factum est», que traducen ‘Y
el verbo, se hizo carne’, para referirse al niño Jesús.
El papa Noel, nació de la costumbre que tenía Nicolás,
un Obispo de la ciudad de Oslo, que en la antigüedad se llamaba Bari, de
repartir regalos a los niños pobres de su ciudad, en los días de navidad; en
Noruega se llamaba San Nicolás; al pasar al idioma Holandés se llamó: Santa
Claus; al llegar al Francés se llamó Pere Noel y al llegar a nosotros se llamó
el Viejo Noel.
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Los reyes magos, son una costumbre inmemorable, en
donde se representa a las tres grandes razas de la tierra, adorando al Niño
Dios, pero recordemos, que ni eran reyes, ni eran magos; solo jefes de tribus,
que era la usanza de esas tierras.
Algunos argumentan que fueron dos o que fueron cuarenta,
pero es cierto del caso, es que se presentaron unos reyes a adorar al Niño Dios
y le llevaron regalos.
En la catedral de la ciudad Alemana de Colonia, hay un
baúl mortuorio, que contiene los restos óseos de los tres reyes magos y los
análisis de laboratorio que les han practicado, indican que son huesos con una
edad de veinte siglos.
El fenómeno de la estrella de los reyes pudo haber sido
una superposición de planetas, que se da en el sistema solar cada cierto número
de años, cuando dos o tres planetas se alinean en un solo lugar y desde la
tierra, se ven como si fuera un solo cuerpo celeste, muy grande.
Sopetrán, Diciembre 1 del 2012.
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