El Banco de Sopetrán pagará al portador...

El Banco de Sopetrán

Darío Sevillano Álvarez

Fundado en 1882 con un capital de 100.000 pesos oro.

Antes de entrar en materia, es bueno recordar que el sistema bancario colombiano, tuvo sus albores en el año de 1871 y esos inicios se prolongaron hasta el año de 1923.

En este período nacieron los grandes bancos colombianos y aquellos que no tuvieron la fortuna de salir adelante por el impacto de las guerras, fueron comprados por los bancos de Bogotá y Medellín, después del año de 1923.

También es importante decir que esos primeros bancos centralizaban sus acciones en su propia región y que no existía la modalidad de sucursales bancarias y por esta razón nunca hubo una red entre ellos.

El banco de Sopetrán, fue fundado en el año de 1882 con un capital de 100.000 pesos oro, que para esa época era un buen capital de dinero.

Este es el billete que emitió el banco, en mi poder, no tengo otras nominaciones, no sabría decir si solo fue esa emisión o hubo otras nominaciones.

Los investigadores, no han sabido precisar en qué momento de la historia desapareció, pero creemos que su desaparición pudo haberla causado una de tantas guerras que se presentaron a finales del siglo XIX y a principios del siglo XX, (las guerras fueron en los años 1876, 1885, 1895, 1899 y 1902).

Coetáneos de este banco son estos nueve bancos antioqueños:

Banco popular de Medellín, Banco de Medellín, Banco del Progreso, Banco del Zancudo, y las tres casas comerciales Bancarias Restrepo y Compañía, Botero Arango e Hijos y Vicente B. Villa e Hijos.

Para esa época la banca estaba distribuida así: Un 38 % en la ciudad de Medellín; un 21 % en la ciudad de Bogotá; un  18% en la costa Caribe y un 23 % en otras regiones del país.

Los bancos de esa época eran estructuras muy sólidas y casi libres de las famosas quiebras bancarias.

Para el año de 1882, se habían fundado en el país, por lo menos 42 bancos.

Anexo un cuadro que encontré en algunos archivos de Roger y María Mercedes Botero, en donde se muestra la fundación de esos bancos:

Nombre del banco	Ciudad	Año de fundación	Capital inicial (pesos)	Fecha de liquidación
Banco de Antioquia	Medellín	1872	694.000	1892 (?)
Banco Mercantil	Medellín	1874	40.000	1878
Banco Restrepo & Cía.	Medellín	1875	n.d.	1915
Banco de Medellín	Medellín	1881	1.539.000	1902
Banco Popular	Medellín	1882	100.000	1904
Banco Industrial de Manizalez	Manizalez	1882	240.000	n.d.
Banco de Sopetrán	Sopetrán	1882	100.000	n.d.
Banco de Oriente	Rionegro	1883	125.820	1944
Banco de Vicene B. Villa e Hijos	Medellín	1883	20.000	1904
Banco de Progreso	Medellín	1883	60.000	1904
Banco de Botero Arango e Hijos	Medellín	1883	n.d.	1890
Banco del Zancudo	Medellín	1883	n.d.	1913 (?)
Chaves, Vásquez y Cía.	Medellín	1890	20.000	1899 (?)
Caja de Ahorros de Medellín	Medellín	1890	n.d.	n.d.
Banco de Sonsón	Sonsón	1894	10.000	1936
Banco de Salamina	Salamina	1897	n.d.	? (después de 1944)
Banco de Comercio	Medellín	1898	400.000	1902
Banco del Quindío	?	1898	100.000	n.d.
Manuel A. Villegas y Cía.	Medellín	1899	n.d.	1904
Crédito Antioqueño	Medellín	1900	n.d.	1904
Banco de Yarumal	Yarumal	1901	1.000.000	1904
Banco Central	Medellín	1901	n.d.	1904
Banco Minero	Medellín	1901	6.000.000	1928
Banco Agrícola	Medellín	1901	n.d.	1904
Banco Republicano	Medellín	1901	6.000.000	1928
Banco de Jericó	Jericó	1905	100.000	1929
Vásquez, Correa y Cía.	Medellín	1907	n.d.	1920
Banco de Sucre	Medellín	1909	6.000.000	1922
Banco Alemán Antioqueño	Bremen - Medellín	1912	750.000	----
Banco de Caldas	Manizalez	1915	400.000	1925
Banco de Fredonia	Fredonia	1920	500.000	n.d.
Banco Hipotecario de Medellín	Medellín	1920	1.000.000	n.d.
n.d.= No disponible Fuentes: Roger Brew, El Desarrollo Económico de Antioqueña desde la Independencia hasta 1920, Banco de la República, Bogotá, 1977, pág. 116; María Mercedes Botero, "Instituciones Bancarias en Antioquia, 1872-1886", Lecturas de Economía, No. 17, mayo-agosto, 1985, pág. 128; "Reseña Histórica de la Industria Bancaria en Colombia", Revista del Banco de la República, Vol. XVII, No. 198, 1944.

 

Si quisieran ampliar conocimientos sobre este tema, el Señor Alfonso Oquendo Villegas, puede tener algunos datos.

Nótese bien: Es muy curioso que los grandes coleccionistas numismáticos solo exhiben el billete que tengo en el artículo.

Sopetrán, 30 de diciembre de 2012

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21| de diciembre de 2012: ¿Qué pasó?

Informe especial sobre la tormenta solar
del 21 de diciembre 2012

Darío Sevillano Álvarez

 

La tormenta solar que estaba pronosticada por los grandes científicos de la Tierra para el día 21 de diciembre del 2012, se produjo con toda la exactitud del caso, pero les tocó a los moradores de la Tierra del sector oriental, pues recordemos que amanece primero en ese lado, esto equivale a decir que a los del sector occidental de la Tierra, nos tocó en el día jueves 20 de diciembre.

Según los informes científicos, la tormenta se produjo en las horas de la tarde y como todos estaban en alerta máxima, solo hubo que desviar los rumbos de algunos vuelos comerciales y suspender aquellos que por alguna circunstancia, se temía fueran derribados.

Este gráfico nos indica cómo funcionó el anillo magnético del planeta.

Todo parece indicar que nuestra Tierra fue tan bien diseñada por el Creador, que su anillo magnético de protección, o magnetosfera, funcionó a las mil maravillas para desviar las ondas electromagnéticas de la tormenta y mandarlas con su música para otra parte.

Pero la cosa no para ahí, pues nuestros científicos dicen que estamos en un ciclo solar de 11 años en el que pueden presentarse un sinnúmero de tormentas.

Recordemos de paso, que las tormentas solares, han acompañado a la humanidad, desde cuando apareció en la Tierra.

Así se desprende la parte del Sol que genera la tormenta.

Los estudiosos de estos temas, dicen que las tormentas están clasificadas en la siguiente forma:

G1, G2, G3, G4 y G5, siendo G1 las más suaves y G5 las más complicadas.

Esto no debe asustarnos, porque su majestad el Hombre ha venido perfeccionando los protocolos de defensa contra todos los riesgos que debe correr en un universo feroz y vendrán, con toda seguridad, días mejores.

En este lugar, en donde vivieron los mayas, se efectuó esta celebración.

Pero es importante decir que no se equivocaron los mayas, porque en su calendario, nunca expresaron que la tierra se fuera a extinguir en esta fecha y su único anuncio, fue el final de un tiempo y el principio de otro.

Eso lo explicaron muy bien, los estudiosos de ese calendario y los altos miembros de esa cultura que aún viven en la Tierra.

Estas son algunas de las figuras que adornan el fatídico calendario.

 Así luce el calendario Maya, que es una verdadera joya de antropología.

Con este sistema de engranajes, ellos calculaban el tiempo.

Tampoco se equivocaron los científicos de las grandes organizaciones que observan a diario el comportamiento del universo, porque siempre dijeron que el 21 de diciembre sería un día tranquilo para los moradores del planeta.

Edificio en donde funciona la NASA.

Grupo de científicos que trabajan para el bienestar del planeta.

Este es el logo que identifica la NASA, una de las organizaciones más famosas de la Tierra en investigaciones sobre el Universo, naves espaciales y astronautas.

Tampoco nosotros nos equivocamos cuando publicamos el famoso artículo. Los últimos tiempos: Pronóstico reservado, que le dio la vuelta al planeta en dos o tres días, porque cuando anunciamos la tormenta solar del 21 de Diciembre, hablamos del anillo magnético de nuestra tierra y dijimos que se tenía casi la certeza de que en el mes de diciembre, se presentaría una tormenta solar y al terminar el artículo, dijimos. «Claro está que esta es una opinión y no un axioma, que tiene que funcionar así».

Esto es parecido a las suposiciones que se hacen respecto a la destrucción de la jerarquía Eclesiástica de Roma, que dicen se acabará muy próximamente y que el papa se tendrá que refugiar en Alemania, pero todo esto está en el marco de las especulaciones y lo basan en profecías que no sabemos si son confiables.

Las cosas que anunciamos en este artículo pueden pasar porque algunas de ellas, son pan cuotidiano en el Universo; lo mejor es estar preparados, para que no nos sorprendan.

Recuerden el refrán antioqueño:
«Es mejor llevar poncho, por si de pronto llueve».

Y como llevábamos el poncho, la lluvia no produjo daños.

Sopetrán, 25 de diciembre del 2012.

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