Fiesta de las Frutas 2012

El primer día de la fiesta
Darío Sevillano Álvarez

Se desenvolvió así:

A las cinco de la mañana, los músicos de la banda de la Casa de la Cultura Humberto Jiménez Tavera, nos despertaron con una alborada tropicalísima y con fuegos pirotécnicos.

La actividad de Amor por Sopetrán que estaba programada para las diez de la mañana, la comenzaron a las siete, para que les pudiera rendir, toda vez que consistía en limpiar los espacios públicos de la ciudad.

Los jóvenes de la Normal y los del Colegio, acompañados de líderes cívicos, los miembros de la Casa de la Cultura y los de la Policía Nacional recorrieron las calles, carreras y espacios públicos, para dejarlos en perfecto estado.

Omnes laborant, que traduce ‘Todos trabajan’, como dice el Evangelio, para que la ciudad se pueda presentar muy limpia ante el flujo de turistas que nos visitaran durante la semana.

Estos dos jovencitos limpian las bases de los
andenes de cualquier asomo de hierbas.

La meta colectiva se está cumpliendo y los espacios públicos están quedando habilitados para el desarrollo de las fiestas.

Otro equipo, integrado por los empleados de la Casa de la Cultura y por los miembros de equipo de limpieza de las Empresas Públicas del Municipio, se dedica a limpiar el atrio parroquial, que es el principal escenario de nuestras fiestas.

En el Palacio Municipal luce este afiche.

Las diferencias, ya son notables, fíjense
cómo estaban las escalas y como las están dejando.

Veinte minutos más y
nuestro atrio estará listo para las fiestas.

Aunque estábamos citados a las siete de la noche en la estación Terpel, para asistir al desfile de las candidatas al Reinado de la Juventud y de las Frutas, el acto solo empezó a las siete y cuarenta y cinco minutos, circunstancia que alejó al público que esperaba, porque se creía que lo habían suspendido.

Al fin llegaron las candidatas, pero se presentó una circunstancia poco usual: Las mototaxis que las llevaban salieron a toda marcha y los que creíamos que íbamos a acompañar a las beldades, tuvimos que salir corriendo para alcanzarlas, cosa que no fue posible y el desfile fracasó.

Así lucia cada motocarro.

A pesar de que algunos se habían marchado, éramos muchos los curiosos que queríamos acompañar a las princesas.

La dicha no duró mucho tiempo, porque a los cuatro minutos, las princesas se fueron a toda marcha y empezó la desbandada.

El destino final, era el lugar de J. J. Licores, pero como no había un lugar alto para colocar a las princesas, el público se apeñuscó alrededor de las candidatas y las personas que estaban en la plaza, no alcanzaban a ver lo que estaba ocurriendo.

Se les pide a los organizadores de los eventos,
una mejor planeación de lo que van a realizar.

Sopetrán, 25 de junio del 2012

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